16 DE ENERO
1531. Asume el gobierno de la Nueva España, la segunda Audiencia Gobernadora, compuesta por Sebastián Ramírez de Fuenleal, Juan de Salmerón, Alonso Maldonado, Francisco Ceynos y don Vasco de Quiroga. Terminará su mandato el 17 de abril de 1535.
1826. Nace en Galeana, Nuevo León, Mariano Escobedo, quien habrá de distinguirse como liberal y militar. Prestará grandes servicios a la patria: en 1847 luchará contra la intervención norteamericana como soldado; luego contra los conservadores en la Guerra de Reforma. Tesoneramente irá ganando grados superiores. Peleará heroicamente contra los invasores franceses y los imperialistas de Maximiliano, de quien, al rendirse en Querétaro en 1867, recibirá su espada. Ha de morir en la ciudad de México el 22 de mayo de 1902.
1861. Instalado el gobierno del presidente Juárez en la capital de la República, después de un largo peregrinar por el territorio nacional, hoy se publican las Leyes de Reforma expedidas anteriormente en el puerto de Veracruz.
1866. Arriba a México el barón Saillard, enviado de Napoleón III, quien viene a comunicar a Maximiliano la decisión del emperador francés de retirar sus tropas invasoras, dejándolo solo.
1869. Se publica el decreto por el que el presidente Juárez crea el Estado de Hidalgo.
1902. Se siente fuerte temblor en el Estado de Guerrero, que destruye gran parte de la ciudad de Chilpancingo, causando grandes daños materiales y algunas víctimas.
1915. Don Eulalio Gutiérrez, Presidente provisional de la República, después de lanzar un manifiesto acusando a Villa de peculado moral y económico, abandona la capital y toma camino a Pachuca, Hidalgo. Sólo lleva las tropas de José Isabel Robles y las de Lucio Blanco. Con ellos van José Vasconcelos y otros políticos seguidores de esa facción ejecutiva.
1915. El general Eulalio Gutiérrez, al abandonar la capital, deja acéfala 'supuestamente' la Presidencia de la República conferida por la Convención Nacional Revolucionaria de Aguascalientes. En esta fecha asume el cargo provisionalmente el general Roque González Garza quien fungía como presidente de la Convención, la cual al siguiente día le ratifica el cargo. Lo de acéfala 'supuestamente' se refiere a que el general Eulalio Gutiérrez se 'llevó el Poder' y lo ejerció como trashumante hasta el 2 de junio del mismo año, en que dimitió oficialmente.
1917. Telegrama Zimmermann. La inteligencia naval de Inglaterra detecta el envío secreto de un telegrama cifrado en clave, de parte del Gobierno Alemán a su Embajador en Estados Unidos, el Conde Johann von Bernstorf con instrucciones de enviarlo a su homólogo en México, von Eckardt -este reenvío ya no fue en clave, lo que le permitió a Inglaterra capturar y publicar la versión mexicana del telegrama y de esta manera evitar poner al descubierto el hecho de que descifraba ya durante los meses pasados los telegramas alemanes. Este telegrama era una comunicación de máximo secreto del ministro alemán de relaciones exteriores, Arthur Zimmermann, cuyo texto reproduzco a continuación:
Máximo Secreto.Para la información personal de su Excelencia, y para ser entregado al Ministro Imperial en México.
Tenemos la intención de reiniciar ataques submarinos a ultranza el primero de febrero. No obstante, esperamos mantener neutrales a los Estados Unidos. En el evento de que esto no sucediera, dicto las instrucciones para que haga usted a México la propuesta de una alianza en los siguientes términos:
Hacer la guerra y concluir la paz en común, proporcionar apoyo financiero general y entendimiento de nuestra parte de que México reconquistará el territorio perdido en Texas, Nuevo México y Arizona que perdió en 1848. Los detalles del acuerdo quedan a su criterio.
Informe lo anterior, en secreto, al Presidente, tan pronto como estemos seguros de que Estados Unidos entrará a la guerra, y añada la sugerencia de que él debería, por iniciativa propia, invitar a Japón a sumarse de inmediato a la alianza y al mismo tiempo, ser intermediario entre Japón y nosotros.
Señale al Presidente el hecho de que el empleo irrestricto de nuestra flota submarina ofrece ahora la posibilidad de que Inglaterra firme la paz en unos pocos meses. Acuse de recibo.Zimmermann.
Para el 25 de febrero, el presidente estadounidense Woodrow Wilson había recibido copia del telegrama, el cuál expuso a la prensa el 1º de marzo. Para el 14 de abril, después de consultas con sus asesores y negociaciones, a una semana después de la entrada de Estados Unidos en la Gran Guerra en contra de Alemania, el Presidente Venustiano Carranza rechazó la oferta de Zimmerman, respetando así sus deberes de país neutral durante la Primera Guerra Mundial.
1952. Se publica en el Diario Oficial de la Federación el decreto del 31 de diciembre de 1951, por el que se eleva a la categoría de Estado libre y soberano de la República, el territorio de Baja California Norte.
1982. Muere en la ciudad de México, el licenciado y general Francisco Ramírez Villarreal, constituyente de 1917 y quien naciera en Saltillo, Coahuila, el 23 de febrero de 1891. Desde muy joven entró a la lucha revolucionaria a las órdenes de don Venustiano Carranza. Colaboró en la redacción de la Carta Magna de 1917; fue gobernador interino de Colima, procurador de justicia en Nuevo León y subsecretario de Gobernación a nivel nacional.
1992. En este día, el Gobierno de la República de El Salvador y el Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN), suscriben en Chapultepec, México, los Acuerdos de Paz o 'Acuerdo de Chapultepec', poniendo con ello cierre a uno de los capítulos más dolorosos de la historia de El Salvador. Los 12 años de conflicto armado tuvieron como consecuencia más de 75,000 muertos. México jugó un papel muy importante en el trayecto hacia la firma de estos acuerdos.
Muchas gracias.
Excelentísimo señor Elías Antonio Saca González, Presidente de la República de El Salvador.
Excelentísimo Oscar Berger Perdomo, Presidente de la República de Guatemala.
Excelentísimo señor Manuel Zelaya, Presidente de la República de Honduras.
Excelentísimo señor Daniel Ortega, Presidente de la República de Nicaragua.
Señor don Rubén Orellana, Presidente de la Asamblea Legislativa de la República de El Salvador.
Señor Agustín García Calderón, Presidente de la Suprema Corte de Justicia de la República de El Salvador.
Señor Alfredo Cristiani, ex Presidente de El Salvador.
Señor Armando Calderón Sol, Presidente de San Salvador.
Señor don Javier Pérez de Cuéllar, ex Secretario General de la Organización de las Naciones Unidas.
Señor Álvaro de Soto, representante especial del Secretario de General de Naciones Unidas para El Salvador.
Excelentísimos señores Vicepresidentes y Ministros de Relaciones Exteriores.
Señores miembros de la Comisión Negociadora y de designatarios de los Acuerdos de Paz de El Salvador.
Señores miembros de la Comisión Organizadora del XV Aniversario de la Firma de los Acuerdos de Paz.
Señores dirigentes y parlamentarios de los distintos partidos políticos en El Salvador.
Señoras y señores representantes dignatarios de países amigos de organismos internacionales.
Miembros del cuerpo diplomático.
Amigas y amigos salvadoreños.
Señoras y señores:
Como miembro del Grupo de Países Amigos de la Paz en El Salvador, es un honor para México el participar en esta Conmemoración del XV Aniversario de los Acuerdos de Paz que han sido el fundamento para la reconstrucción de instituciones políticas, económicas y sociales de este país entrañablemente querido.
Traigo a este generoso y hospitalario pueblo el saludo cordial y profundamente solidario de sus hermanos mexicanos.
Los acuerdos de paz que hoy conmemoramos nos dieron a todos la oportunidad de vivir una nueva época para la región, con su esfuerzo encomiable para superar diferencias, para superar agravios justificados entre hermanos, los salvadoreños dieron a la región y al mundo una lección de convivencia.
Esta conmemoración, además, es un símbolo de la gran fraternidad que ha unido a nuestras naciones; sobre todo, resume la importancia de la cooperación política entre estados que comparten no sólo el ideal de la paz, sino también intereses legítimos de desarrollo con justicia, democracia, libertad y equidad social.
Como producto de la hermandad que nos une con el pueblo de El Salvador, México asumió su papel hace 15 años para contribuir a resolver el conflicto que prevalecía en este país y a conciliar a los adversarios.
Para México, y estoy seguro que para los países amigos, la preservación de la paz en la región, el fortalecimiento de las instituciones democráticas y la promoción del bienestar de nuestros pueblos, era, entonces, y es ahora fundamental.
Evocamos hoy, en este lugar, un proceso de diálogo y conciliación que dio un nuevo aliento democrático a esta República y que ahora la impulsa en la búsqueda del desarrollo, la equidad y la paz social.
En Chapultepec, las partes en conflicto establecieron que el significado de estos acuerdos, es una ratificación de la vocación pacifista y laboriosa del pueblo salvadoreño, y entraña el fin de una época de dolor y sufrimiento, por lo que esta fecha es el comienzo de una nueva era de paz y democracia, así fue.
Hoy recordamos a todos los que mostraron su fe en la negociación, porque con su trabajo silenciaron las armas para que hablara la política e inauguraron una nueva etapa democrática.
Han pasado ya tres lustros, del inicio de esta compleja reconstrucción de la vida política en El Salvador y comprobamos con satisfacción que esta Nación laboriosa consolida su democracia, reactiva su economía al tiempo que ha podido, poco a poco reconstituir el tejido social y seguir los pasos de la reconciliación.
La reconciliación implica que el diálogo sincero debe ser el instrumento privilegiado para afianzar el Estado de Derecho y la democracia misma, esto es precisamente lo que hace día con día El Salvador, y lo que hacen desde diferentes puntos de vista los partidos políticos aquí presentes.
Nuestro gran poeta Octavio Paz, mexicano por nacimiento, pero latinoamericano por vocación, decía que todas las grandes cosas que los hombres hemos hecho son hijas del diálogo.
Y añadía también que la cultura y la civilización son siempre confluencia de distintas tendencias, son siempre confluencia de voces.
La paz en El Salvador se ha consolidado a partir de la democracia, a partir de elecciones periódicas que implican la capacidad de discutir en paz y de resolver las diferencias mediante el voto.
La capacidad de renovar el poder a partir del diálogo constante y el acuerdo entre contrarios.
Los mexicanos hemos presenciado en El Salvador una lección de vida que se asocia con la dimensión humanista de la paz y la democracia con una efectiva respuesta a las demandas sociales.
Gracias a lo que simbolizan estos Acuerdos de Paz hoy recordamos que la mejor solución a la violencia, a la inestabilidad y a la intolerancia es trabajar sin descanso por el bienestar de los pueblos.
Como lo ha dicho el Presidente Saca, El Salvador es ahora un país que tiene paz en libertad, que sale adelante con su esfuerzo, trabajando, que resuelve diferencias con la institucionalidad creada.
La paz que suscribieran en México, el doctor Oscar Santamaría, el comandante Schafik Handal y otros distinguidos salvadoreños fincó los sólidos cimientos de la paz en la región y con ello abrió una esperanza y un camino para el desarrollo de nuestros pueblos de Mesoamérica.
Una esperanza que no podemos cancelar y un camino que debemos recorrer.
De entonces a la fecha el mundo ha sufrido una transformación vertiginosa, los cambios y transformaciones que hemos experimentado en todos los órdenes, en el plano tecnológico, comercial, demográfico, financiero, ambiental, nos enfrentan a todos a nuevos y comunes desafíos.
El reto es garantizar a nuestros pueblos condiciones mínimas de seguridad, crecimiento y distribución del ingreso; brindarles igualdad de oportunidades a través de la educación de calidad, del acceso a la salud, de los servicios básicos, de la superación personal, familiar y nacional que sólo puede darse a través del empleo y del trabajo digno.
Los pueblos latinoamericanos y en particular Mesoamérica que hermana a México con Centroamérica, toda, tenemos que avanzar codo con codo por el camino que nos abrieron a todos Los Acuerdos de Paz.
Hoy los nuevos desafíos de un mundo global obligan a los pueblos y las regiones a las que pertenecen a actuar más eficazmente, de manera más integrada y con una visión común frente a otras regiones del mundo.
La profundidad de nuestras raíces históricas, culturales y sociales nos permitirá avanzar en este nuevo mundo con la plena garantía de nuestras identidades nacionales.
Pero sólo podremos hacerlo si tenemos la audacia de mirar con decisión y encaminarnos, también decididamente, hacia un futuro común.
Las naciones latinoamericanas son naciones fraguadas en la pluralidad y en la diversidad, en esa pluralidad está la fuente obligatoria del diálogo, del acuerdo y la razón que son la razón de ser de la política misma.
El Salvador y México hemos permanecido unidos en momentos cruciales, lo mismo frente a las más duras calamidades de la naturaleza, que frente a los desastres de la guerra.
Hoy como ayer, a los pueblos latinoamericanos nos toca el seguir promoviendo una presencia constructiva en la región y, desde luego, en el Sistema de Integración Centroamericana, como en diversos ámbitos que han ido expandiendo hacia Mesoamérica, entendida ésta como una referencia política más que geográfica.
Quiero expresar nuestro compromiso de impulsar la construcción de una agenda mesoamericana que nos vincule más estrechamente con toda América Central, el Caribe y Sudamérica.
Una agenda que incorpore la importante contribución de naciones que compartimos intereses y que tenemos afinidades y convergencias políticas entre nosotros.
México expresa su voluntad de actuar al lado de sus amigos y socios mesoamericanos en diferentes causas.
Uno. En el impulso a la cooperación que estimule el desarrollo humano y la infraestructura con sentido social.
Dos. En la articulación de estrategias comunes reflejadas tanto en el Programa de Integración Energética Mesoamericana como en el Plan Puebla-Panamá.
Tres. En la profundización de la confluencia de naciones mesoamericanas en temas como la migración.
Cuatro. En la formación de un frente común contra la delincuencia y el tráfico ilícito de armas, de drogas o de personas.
Lo ratifico aquí, ante quienes representan al pueblo salvadoreño, la voluntad de México de aportar un compromiso solidario con imaginación y responsabilidad compartida en el liderazgo que consolide los fundamentos de una América Latina unida, fraternal y solidaria.
Hemos dicho que queremos más México en el mundo y más mundo en México y para nosotros este principio debe comenzar en América Latina y, particularmente, en países entrañablemente queridos como es El Salvador.
Por eso hoy refrendo nuestra clara vocación latinoamericana, Latinoamérica no es muchos pueblos, sino un solo pueblo, un pueblo que vive una cultura y una historia común, un pueblo que está libremente unido y vinculado desde la raíz.
Amigas y amigos:
Hoy conmemoramos, todos, un hecho histórico que refleja el coraje y la gallardía del pueblo salvadoreño; una proeza verdadera y entendemos que por encima del odio y de los agravios fratricidas, los salvadoreños pudieron darse la mano y con ello marcar una ruta esperanzadora para América Latina y para la humanidad.
Y sabemos que la paz no basta, que la ausencia de guerra es indispensable para el desarrollo de los pueblos, pero no conduce por sí sola a la prosperidad, ni a la justicia.
Para lograr la justicia se requiere que ésta sea asumida como tal, como un propósito explícito y compartido, como una constante y perpetua voluntad de los gobernantes de dar a cada quien lo suyo, de acuerdo a su dignidad humana.
Y así como en el pasado estuvimos comprometidos con la paz en El Salvador, cuyo fruto maduro irradió a todo el continente, hoy estamos comprometidos con el mismo propósito en otro singular reto; el reto de la construcción de condiciones de equidad y de igualdad de oportunidades para nuestros pueblos.
En la reducción de las terribles desigualdades que marcan a nuestras sociedades latinoamericanas, y que son justificado motivo de indignación, hoy el mayor compromiso con la paz radica, precisamente, en construir la justicia.
La paz de El Salvador unió hace 15 años a los pueblos de América Latina y a los líderes del mundo; hoy nos une nuevamente y nos convoca a refrendar el anhelo de justicia social y de bien común para nuestros pueblos.
Hoy conmemoramos la firma de los acuerdos de paz, el día de mañana, amigas y amigos, seamos capaces de conmemorar la concreción y el cumplimiento de los acuerdos de justicia, que son hoy el reclamo de nuestros pueblos y que unidos en la hermandad latinoamericana hayamos sabido cumplir con este deber elemental de igualdad, de equidad y de justicia, con quienes viven y sufren la pobreza en nuestro continente.
Hago votos, en favor de que el espíritu de paz y de concordia que preside esta conmemoración y que honra a los salvadoreños, se extienda hacia todos los pueblos de América Latina y el Caribe, y eso nos permita avanzar unidos hacia un futuro de justicia y prosperidad para todos.
Muchas gracias y muchas felicidades al pueblo de El Salvador.
2007. La Universidad Nacional Autónoma de México puso en marcha la super computadora más potente de México y América Latina, con capacidad para realizar más de 7 mil millones de operaciones aritméticas por segundo.
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A nosotros nos acomoda bien, nos gusta y nos agudiza el desempeño, el trabajar en un escenario bajo presión. Estamos hechos a la adversidad.
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