Pues efectivamente el día de hoy se cumplen los 475 años de las apariciones de la Virgen de Guadalupe a San Juan Diego. Una efeméride completamente mexicana y al parecer día oficial de asueto pues en muchos lugares hoy no hubo funciones incluído el restaurante Azul y Oro de la UNAM, donde planeábamos comer después de la graduación de mi generación de Relaciones Internacionales. ¡Enhorabuena, por cierto!
El fenómeno en la Ciudad de México es impresionante. Desde ayer por la noche que estuvimos en una cena con los compañeros del coro, durante el regreso en pesero por Tlalpan a eso de las 22h30, banqueta y carril inmediato fluían con gente apurada a pie y en bicicleta. Grupos, familias y amigos se enfilaban hacia el norte de la ciudad en una operación hormiga sin fin para estar por la mañana sin falta en la Basílica. A mí nunca me había tocado ver más de cerca las multitudes, pero ver esa fila interminable, uno a uno de los peregrinos avanzando a su propio pie, en esta gran ciudad ya por la noche cuando nadie se atreve a andar así en la calle, es como si la ciudad hiciera su noche en vela, su 'nuit blanche', su alborada, cobrando vida estas grandes avenidas que ni siquiera durante el día tienen tanta afluencia peatonal.
El año pasado (2005) me tocó vivir la influencia guadalupana en París. La misa para celebrar a la morenita en Notre-Dame (Notre Dame de Guadalupe, por supuesto) fue el domingo 11 de diciembre. Misa en español, con cánticos e instrumentos aparte del órgano -lo cuál es muy raro en la catedral-, muchas banderas e incluso unos niños vestidos de Juan Dieguito y Adelita. La lectura del Nican Mopohua en francés, español y náhuatl fue una experiencia impresionante. Sobre todo el hecho de estar tan lejos lo hacían tan emotivo. No era raro encontrar siempre alguien en el altar de la Guadalupana en la catedral, que por cierto sus altares también conocí en Nueva York, en España y en un restaurante en Amsterdam. Incluso hay un cuadro de la Virgen en la tumba de Porfirio Díaz, también en París. Les dejo el texto original que escribí ese día al respecto en este vínculo y les dejo unas fotos y el video. Sólo den Play.
PD. Algo curioso. Por ahí escuché en las noticias cómo migrantes mexicanos en los estados sureños, además de estadounidenses y guatemaltecos, cruzaron la frontera mexicana para rendir homenaje a la virgen en las ciudades fronterizas. ¿Sus razones? No es lo mismo hacerlo en California o en Guatemala capital que en tierra mexicana, donde ella apareció. Lo curioso es que en el tiempo de las apariciones... éramos el mismo territorio, no es así? Saludos =)