10 DE ABRIL
1864. Llega al Castillo de Miramar, cerca de Trieste, la comisión de conservadores que van a ofrecerle a Maximliano de Habsburgo, archiduque de Austria y a su esposa la emperatriz Carlota Amalia, la corona Imperial de México. Los comisionados son: Joaquíen Velázquez de León, José María Gutiérrez de Estrada, José M. de Landa, Ignacio Aguilar, Adrián Woll, Antonio Escandón, Ángel Ilesias y José Hidalgo.Maximiliano acepta el trono imperial de México, seguro de que es todo el pueblo mexicano el que lo pide. Como Napoleón III, emperador de Francia, es el coautor de esta trama, impone a Maximiliano un convenio que se llama de Miramar.
La pintura, intitulada Ernennung Maximilians zum Kaiser Mexikos (1867), de Cesare Dell'Acqua y localizada en el Museo Histórico del Castello di Miramare, ilustra este momento histórico.
1864. Convenios de Miramar. Se firman en esta fecha en el Castillo del archiduque Maximiliano de Habsburgo, por Joaquín Velázquez de León, en representación del mismo Maximiliano, y por monsieur Herbert, en representación de Napoelón III.
Por tales tratados, se estipula que las tropas francesas de invasión en México se irían reduciendo hasta que quedaran solamente veinticinco mil elementos, incluyendo la llamada Legión Extranjera.
La desocupación sería gradual a medida que Maximiliano fuera formando la tropa nacional. La Legión Extranjera permanecería en México por un mínimo de seis años después de la salida de los invasores franceses, y tal legión estaría constituida fijamente por ocho mil soldados.
Los gastos de la expedición francesa a México son fijados en doscientos setenta millones de francos y serían pagados por México -el Imperio de Maximiliano- con un tres por ciento de interés anual.
Además el Imperio debería entregar a Francia bonos por setente y seis millones de francos que correspondían a los gastos ya efectuados por cincuenta y cuatro millones y los doce millones restantes para indemnizaciones a damnificados franceses.
1896. Nace en la ciudad de México, Julio Jiménez Rueda, quien habrá de distinguirse como abogado, orador, doctor en letras, escritor, dramaturgo y funcionario público.
1899. Muere en la ciudad de México, el célebre ingeniero don Mariano Bárcena, quien naciera el 25 de julio de 1848, en Ameca, Jalisco.
En el año de 1877 fue el fundador y director del Observatorio Astronómico de México. En minería hizo diversas e importantes investigaciones y escribió varios tratados sobre el asunto. En 1890 fue gobernador de su Estado donde ejerció con honestidad y acierto el puesto.
1910. Por conducto de don Teodoro Dehesa, se concerta para esta fecha una entrevista entre el presidente Porfirio Díaz y don Francisco I. Madero, en Palacio Nacional. El candidato a la presidencia Francisco I. Madero dice ser tratado con altanería y descortesía por parte del general Díaz.
1915. Segunda Batalla de Celaya. El general Francisco Villa se prepara para atacar a las fuerzas constitucionalistas de Obregón en Celaya. Pide refuerzos a los villistas de Michoacán. Obregón por su parte recibe refuerzos de la División Centro de Dolores Hidalgo, Guanajuato.
1919. Muerte de Zapata. Confabulado el coronel Jesús M. Guajardo para asesinar al general Emiliano Zapata, se gana primero la confianza de éste, simulando ser sublevado contra el gobierno de Carranza.
En esta fecha le tiende una emboscada en la hacienda de San Juan Chinameca, Morelos. Invitado de antemano, llega el general Emiliano Zapata con algunos de sus hombres al cuartel de Guajardo, y confiado, entra en el casco de la hacienda, donde al toque de una Marcha de Honor, los soldados del traidor abren fuego contra ellos. Zapata cae abatido por las balas traicioneras que con él matan también a su reivindicación social.
Así terminan los días del sublime luchador campesino considerado como el Padre del Agrarismo Mexicano.
1920. Distanciado en principio el presidente Carranza con el gobernador constitucional de Sonora, don Adolfo de la Huerta, por razones de la sucesión presidencial, ahora, por motivo del envío de tropas federales a Sonora, de la Huerta rompe relaciones con el gobierno federal autorizado por la legislatura local, en razón de la violación de la soberanía estatal. El general Plutarco Elías Calles es nombrado jefe de las fuerzas del Estado.
